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EL MATRIMONIO- el modelo de un cuadro perfecto.

Hace poco hacía una referencia sobre el privilegio de ser madre. Y hablaba de esa bendición que Dios le ha dado a la mujer de concebir, de ser generadora de vida, de ser constructoras de grandes destinos. Más, para que este privilegio fuera posible se necesitó la intervención de 2, y para que el destino de ese hijo sea más propenso a la felicidad, tenga menos posibilidades de un fracaso, menos riesgos de tomar malas decisiones, se necesita la intervención de 2 (papá y mamá). Hoy quiero mostrar a la familia como el modelo de un cuadro perfecto para Dios.

Es verdad, que hay tantas mujeres esforzadas y emprendedoras, que han cumplido con ese rol de la crianza solas, porque por alguna determinada situación fueron impulsadas a esto; pero no es lo más sano, ni normal, ni puede convertirse en una salida fácil. Esto va contra el diseño de ese cuadro original.

La pregunta es: ¿El cuadro de un hogar sin una madre o un padre, sería bueno o ideal? La respuesta es no. No es bueno ni tampoco ideal ni para la mujer, ni el hombre y muchísimo menos para sus hijos. Una familia dividida contra si misma, no encuadra dentro del modelo de ese cuadro perfecto diseñado por Dios.

No es bueno, porque cuando el hombre estuvo solo sobre la tierra, Dios miro ese cuadro y le pareció que no estaba completo y pensó: ¡... No es bueno que él hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada! Génesis 2:18, y tomó la decisión de crear a la mujer, sacándola de una costilla del hombre. Y como esa costilla que somos complementamos, añadimos valor a ese cuadro. 

Siguió observando el cuadro, y le dio al hombre un mandamiento que sería extensivo para un futuro, cuando dijo: ¡Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser! Génesis 2:24. Hoy en día en ese cuadro, hay demasiadas personas que están interfiriendo en el desarrollo emocional, espiritual y económico de esa pareja.

Nosotros pretendemos ser más sabios que Dios, el Señor nos emancipó, nos dijo: "Es necesario que como pareja, tomen decisiones solos, que se equivoquen y aprendan de sus errores, que se caigan y se levanten". Pero algunos padres, pretendiendo ser mejores que Dios, se han involucrado tanto al matrimonio de sus hijos y les han evitado madurar. Sin imaginar que no van a estar allí de por vida sobreprotegiendo, que un día no estarán allí para esa nuevo hogar y esa pareja no sabrá que hacer. Los padres de ese nuevo matrimonio no estaban en el modelo de un cuadro perfecto para Dios.

Dios seguía observando el cuadro y sabía que no estaba completo, y les dio esta orden: ¡Multipliquense, llenen la tierra! Génesis 1:28. El salmista lo dijo de esta forma: "Los hijos son una herencia del Señor, los frutos del vientre son una recompensa. Como flechas en las manos del guerrero  son los hijos de la juventud. Dichosos los que llenan su aljaba con esta clase de flechas" salmo 127:3-5. Y aunque los hijos forman parte de ese cuadro perfecto, también es claro que es una decisión que hay que tomar con los dos pies puestos sobre la tierra. Un hijo no puede ser el resultado de una pastilla olvidada, de llevar una vida desenfrenada, debe ser el producto de una decisión madura y consciente de lo que será el futuro de esta persona.

Algunos fueron muy rápidos cuando estaban en esa etapa de enamoramiento de crear su propio cuadro, sin analizar nada. Pero con el pasar del tiempo, cuando observaron que había tantas diferencias de caracteres, que sus temperamentos eran tan diferentes, que habían pocas afinidades pero si muchas diferencias, surgió en la mentalidad humana la idea otro cuadro perfecto en donde no había espacio, ni tiempo que perder en una determinada relación, y es así como muchos matrimonios han tomado la decisión de hacer su propio diseño de una familia perfecta.

Dentro de ese nuevo diseño de un cuadro perfecto, no era indispensable la figura de un hombre para la crianza de un hijo o el buen funcionamiento de la familia, así que la forma de ese cuadro incluyó un elemento como "el divorcio",  olvidandonos de las palabras de Dios cuando dijo: "Lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre" . Porque según esta sociedad moderna, es más sano para el hijo crecer sin una de esas 2 figuras, por el daño emocional que se está causando, que invertir tiempo, dinero o otros recursos tratando de salvar la familia. Otros rediseñaron el cuadro perfecto, en donde han decidido que es necesario permanecer juntos, con el fin de no causar ningún daño emocional, así que como 2 valientes deben sacrificarse en algo, pero se les permite tener una relación con una tercera persona para suplir esa carencia.

Ambos diseños están equivocados, ni debemos ser "valientes" y soportar situaciones críticas, que vayan en detrimento de la persona, pero tampoco debemos  "víctimizarnos" y salirnos por la tangente sin buscar la forma de solucionar los problemas y evadiendo las responsabilidades. Hay que buscar soluciones, trabajar en pro de esas diferencias y pedirle a Dios que nos ayude a armar el modelo de cuadro perfecto. La biblia dice: "Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes. En vano madrugan ustedes, y se acuestan muy tarde, para comer un pan de fatigas, porque Dios concede el sueño a sus amados" Salmo 127:1-2.

 Alguien dijo: "EL MATRIMONIO ES LA ÚNICA INSTITUCIÓN DEL MUNDO, DONDE PODEMOS GANAR LA GUERRA, PERDIENDO EN EL AMOR", pero es un PRECIO DEMASIADO ALTO.  Es cierto, cuando se presentan conflictos dentro de una matrimonio, la persona que cree tener la razón, y logra "vencer" y hace alarde de ese "gané", venció en la guerra pero fracasó al modelo del cuadro perfecto de Dios. Ganó para si, pero no para sus hijos, ni para la familia y menos para su entorno. Porque está sumándole a esta sociedad un joven más lleno de conflictos emocionales, espirituales y un modelo de familia distorsionada. Está sumándole a esta sociedad una posible persona con malos habitos. No es la regla general.

Esta persona dijo, que cuando se ganaba esta guerra se perdía en el amor. Entonces no hubo ganancia, porque el amor es el mandamiento más sublime que nos dio Dios. El amor cubre multitud de pecados, es el vinculo perfecto. Así que a ese cuadro, Dios le añadió un ingrediente que se convirtió en el lienzo donde sería pintada esta imagen, "EL AMOR". Y si nosotros no cuidamos este lienzo, la obra completa de nuestro pintor" Dios" se echará a perder.

Mi motivación es que trabajemos en crear un mejor lienzo, en afianzar cada día ese amor entre el matrimonio, con los hijos, 1 Corintios 13: 4-7 "El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactandioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. El amor no se deleita en la maldad sino que se regocija en la verdad. Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta". Vamos como dice la palabra a correr esa milla extra, a invertirnos el uno en el otro, a trabajar en nuestras debilidades, a buscar la ayuda necesaria. Porque el cuadro perfecto de "UNA FAMILIA SALUDABLE", estuvo desde el comienzo de la creación en la mente de Dios.

Ximena de Camacaro. Autora del "Desafío de ser mujer".

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